El gobierno de EE.UU. fue informado del ataque contra líderes de Hamás en Doha, y aunque lamenta la ubicación, ve la acción como un paso para eliminar al grupo islamista, pese a las implicaciones diplomáticas con Qatar.
La Casa Blanca ha calificado de «desafortunado incidente» el ataque israelí contra líderes de Hamás en Doha, Qatar. A pesar de ello, indicaron que fueron informados previamente y consideran la acción, que definieron como un «objetivo loable», como un paso para eliminar al movimiento islamista.
La portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, declaró en rueda de prensa que el ejército estadounidense notificó al gobierno del presidente Donald Trump antes del ataque. Sin embargo, se negó a confirmar si Israel había alertado al Pentágono con antelación.
«Bombardear unilateralmente dentro de Qatar, una nación soberana y un aliado cercano de Estados Unidos que trabaja muy duro y valientemente, asumiendo riesgos, con nosotros para mediar en la paz no avanza los objetivos de Israel o de Estados Unidos. No obstante, eliminar a Hamás, que se beneficia de la miseria de los que viven en Gaza es un objetivo loable», afirmó Leavitt.
La portavoz añadió que los miembros de Hamás atacados por Israel se encontraban «lamentablemente» en la capital qatarí y que el bombardeo «unilateral» israelí «no contribuye a los objetivos de Israel ni de EE.UU. para lograr la paz» en la región. Leavitt también señaló que Trump considera a Qatar un «poderoso aliado y amigo» y que «se siente muy mal por la localización de este ataque».
Por Matías Fidel.
